A mi tierra Cabana
Hoy me inclino, reverente
a Cabana mi hermosa tierra
decir, feliz soy de la sierra
y orgulloso levantar la frente
Una joya es tu Glorieta
de lindos jardines rodeada
tu belleza es admirada
lo mismo que tu pileta
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| Plaza de Armas |
Tiene cuatro barrios hermosos
San Jerónimo y Huaymaca
Trujillo y Pacchamaca
cada cual más maravilloso.
Tu iglesia es muy bonita
tus calles son empedradas
con subidas y bajadas
dan una vista exquisita
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| Alto de Cain |
Tus casas tienen balcones
el piso a veces de lajas
los techos con muchas tejas,
sostenidas por hurcones.
Desde El Alto con voz gruesa
gritaba el pregonero
con su poncho y su sombrero
usando toda su fuerza.
Conozcan la Cruz del amor
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| Caserón de Pashas |
es un lugar de ensueño
estar allí parece sueño
es un paisaje encantador
Conozcan las ruinas de Pashas
y admiren el Caserón
trabajo hecho con corazón
cuidado con las cabracashas
El río de Llactabamba
en invierno es caudaloso
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| Vista sur de Cabana |
tú tienes que ser muy cauteloso
si quieres ir a Alaypampa
En Aracabo las minas
qué grandes misterios guardarán
algún día los descubrirán
hoy solo casas con calaminas
El alto de Cain admiren
es un lugar acogedor
es un bonito mirador
hermosos paisajes miren
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| Iglesia y Glorieta |
El puente de Maravillas
y el de Cuyubamba también
son construcciones hechas muy bien
dos obras que maravillan
Grandes pozas de La Florida
de Paracocha y Cuyubamba
desde una loma de Huambo
Aija se ve embellecida.
San Martín, es muy bonito
más allá el Alto Respondón
el eco se escucha en el peñón
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| Majestuoso Mashgonga |
al gritar con fuerza un chiquito
Por el Manantial Amarillo
a Trebolpampa nos vamos
nos alegra mientras avanzamos
el canto de un pajarillo
Si vas a Mashgonga amigo
tienes que subir lentamente
mira las ruinas atentamente
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| Rescate de las danzas de Cabana |
y quedarás muy complacido
Cabana estoy orgulloso
en tu seno haber nacido
y
también agradecido
de tu suelo muy hermoso.
Yo soy un hombre del pueblo
solo me queda el consuelo
el día que levante vuelo
que me entierren en tu suelo.
Autor: Manuel Agreda Gonzales
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